19 de mayo de 2010

tigres asesinos

Por los "tigres" nos referimos a los helicópteros militares EC-665-Tiger fabricados por el grupo empresarial Eurocopter que dispone de factorías, entre otros lugares, en Madrid y Albacete. Este modelo en concreto se construye en Albacete, donde medios, gobierno autonómico y local echaron toda la carne en el asador para traerse a la empresa de marras. Los esfuerzos y apoyos de los entes públicos para la construcción de estas armas de matar no se limitaron en su día para atraer la fábrica de "tigres", sino que continua con -por ejemplo- la reciente concesión por parte de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha de 11,2 millones de euros para el mantenimiento de 254 puestos de trabajo (Los hombres trabajan pa poder vivir / en fábricas de armas que los matarán - "Si hay futuro", La Polla Records 1987), lo que equivale a 43.307 € brutos por currela (más de 7 millones de pesetas). A renglón seguido, la empresa comunicó que pueden llegar a tener 1000 personas trabajando para 10 años gracias a los contratos con los Ministerios de Interior y de Defensa. 

Para esto y cosas muuuuucho peores sirven todos los ejércitos... ya pueden intentar lavarse la cara con "operaciones humanitarias".

Éstas son las prioridades en los gastos del erario público. Un helicóptero de los arriba citados tiene un coste de venta de 1.200.000 €. En esta página hay una comparación de lo que representan los gastos en "juguetes" para los militronchos. Empalmamos el asunto de los elicóteros con un hecho acaecido hace tiempo y que, cuanto menos, resulta curioso:

Luis Perezagua era un veterinario de 59 años cuando en agosto de 1989 fue detenido por la Guardia Civil, acusado de ser el presunto autor (según testimonio de los pilotos) del derribo mediante una pedrada de un helicóptero del Ejército de Tierra que le sobresaltó con su estruendo mientras recogía menta, poleo y hierbabuena en Mataelpino. El incidente resultó con el aparato estrellado, provocando heridas a sus tripulantes. El detenido negó los hechos aludiendo que "padecía reuma y no estaba para esos trotes". Finalmente quedó libre y sin cargos... posiblemente el Ejército prefirió pasar página y evitar en lo posible el ridículo máximo.

Ilustración que resume el acontecimiento, dibujado por el lisérgico pero genial Molina.